El Grupo Municipal Socialista visitará las tumbas de los alcaldes que fueron víctimas del golpe de Estado del 36. Además, los concejales del PSOE junto a UGT participarán en el acto en memoria a las personas asesinadas. Después asistirán al acto de la ARMH

Hoy se cumplen 93 años de las Elecciones Municipales en las que Landrove fue elegido alcalde de Valladolid. Y tal día como hoy, hace seis años, la Junta aprobó el Decreto de la Memoria Histórica y Democrática de Castilla y León

Federico Landrove Moiño y Antonio García Quintana. Los dos alcaldes de la ciudad serán homenajeados el próximo domingo 14 de abril, fecha en la que se conmemora la proclamación de la II República. Los concejales socialistas recorrerán ese día el cementerio de El Carmen y se detendrán en las tumbas donde descansan los restos mortales de los dos alcaldes del PSOE que fueron víctimas del golpe de Estado del General Franco.

La primera sepultura que visitarán es la de Antonio García Quintana, alcalde de Valladolid en dos periodos, entre 1932 y 1934 y desde 1936 hasta el golpe de Estado del General Franco. Un alcalde elegido democráticamente al que de nada le sirvió ser muy conciliador, y por ser socialista fue condenado a muerte en el Salón de Plenos del Ayuntamiento. Desde la cárcel escribió una carta estremecedora, perdonando a quienes poco después le asesinarían cobardemente a los pies de la ermita de San Isidro. Tenía 42 años.

A continuación recorrerán el sitio donde está enterrado Federico Landrove Moiño, elegido alcalde en 1931 (elecciones del 12 de abril). En 1936 fue condenado por los golpistas a 30 años de cárcel sólo por ser socialista y allí murió, en la cárcel, abandonado y enfermo, como el poeta Miguel Hernández. Tenía 54 años.

La reflexión del portavoz del Grupo Municipal Socialista, Pedro Herrero, se apoya en los hechos históricos para rechazar cualquier revisionismo:

“Esta no sólo es nuestra historia: Es la historia, que ahora, tras casi 50 años desde la restauración de nuestra democracia, la extrema derecha pretenden borrar.

Y se dispone a hacerlo con la complicidad del PP de Castilla y León. El mismo PP que, de la mano del presidente Herrera y del vicepresidente De Santiago Juárez, hace también justamente hoy 6 años, firmó un decreto de condena a la dictadura y de reconocimiento de las víctimas del franquismo, que ahora quiere derogar.

La defensa de nuestra democracia está por encima de nuestras legítimas diferencias.

Los demócratas tenemos que estar unidos para señalar y apartar a quienes no son demócratas, como ocurre en muchos países.

El PP de Castilla y León tiene un dilema fácil de resolver: Ni para gobernar en la Junta de Castilla y León ni en el Ayuntamiento de Valladolid necesita a esta extrema derecha, que aún, a día de hoy, es franquista.”

Es la referencia a la denominada Ley de la Concordia que promueve el Gobierno Autonómico de Alfonso Fernández Mañueco, que supone la derogación del decreto de la Memoria Histórica y Democrática aprobado hace 6 años por Juan Vicente Herrera. Así se presenta  en la página web de la Junta de Castilla y León:

“La Comunidad de Castilla y León, en su Estatuto de Autonomía, establece como principio rector de las políticas públicas la promoción de la cultura de la paz, de la tolerancia, del respeto y del civismo democráticos.

Por ello a través del Decreto 9/2018, de 12 de abril, de la Memoria Histórica y Democrática de Castilla y León, se constituye el instrumento normativo dirigido a proporcionar un cauce ordenado y sistemático para desarrollar las actuaciones necesarias para recordar y honrar a quienes padecieron persecución o violencia durante la guerra civil y la dictadura franquista y a sus familias, así como a todos aquellos ciudadanos y entidades que llevan a cabo actuaciones dirigidas al conocimiento de nuestra historia y al fomento de la memoria democrática.”

https://www.jcyl.es/web/es/administracionpublica/memoria-historica-democratica.html