La colaboración de los comercios, farmacias y bares se considera una medida efectiva para detectar las situaciones de vulnerabilidad de los mayores que viven solos

 

En los últimos 25 años el número de personas que viven solas se ha duplicado en la ciudad, y el aislacionismo y la soledad de las personas mayores debido a las barreras arquitectónicas de sus hogares supone un obstáculo en su desarrollo personal. En esta realidad se basa la moción conjunta que el Grupo Municipal Socialista y VTLP presentarán en el Pleno del próximo lunes 26 de febrero.

 

La soledad no deseada sigue siendo uno de los mayores problemas en la sociedad. Aunque cada caso tenga su propia circunstancia, son muchas las personas que prefieren seguir viviendo solas en casa. Otras, en cambio, no son conscientes de que ya no son tan independientes como creen, pero no son capaces de pedir ayuda, a veces por no poseer las habilidades suficientes y otras muchas, por la falta de capacidad e incluso familia que les pueda ayudar y orientar.

 

En Valladolid son 672 personas empadronadas las que, con 95 años o más, viven solas en la ciudad: 561 son mujeres (83%) y 111, hombres (17%). Según los datos del Ayuntamiento, son más de 43.000 las personas empadronadas que están solas en casa, el 70% mayores de 65 años. Este hecho afecta a hombres y mujeres de todas las edades, siendo las de más avanzada edad donde queremos centrar más la atención de nuestra moción, por ser personas extremadamente vulnerables y con menos capacidad para gestionar su soledad, la mayoría de las veces no deseada.

Por todo ello, los grupos municipales Valladolid Toma la Palabra y Socialista propone al Pleno la adopción de los siguientes acuerdos:

 

1-Aprobar un nuevo Plan Municipal para las Personas Mayores en 2024 que incluyan programas y proyectos específicos para la prevención, detección, intervención y sensibilización de la soledad no deseada en personas mayores acordes al Plan de Acción de Castilla y León contra la Soledad no Deseada y el Aislamiento Social.

2-Crear una red de barrio mediante la colaboración del comercio de proximidad como tiendas de alimentación, farmacias, establecimientos hosteleros, vecinos y vecinas, asociaciones, etc. para detectar las situaciones de vulnerabilidad de aquellas personas especialmente mayores que vivan en soledad y que esta pueda llegar a ser un problema para su día a día y su autonomía.

 

3-Impulsar una red solidaria de entidades, personas y familias dispuestas a acompañar y abrir su hogar a las personas mayores que sufren soledad no deseada.

 

4-Crear, mantener actualizado y difundir un catálogo de recursos existentes en la ciudad donde se realizan proyectos y actividades de carácter colectivo para generar, mantener y potenciar redes sociales a las personas mayores que las necesiten.