Los informes dan la razón al Grupo Municipal Socialista tanto en la adscripción de la Semana Internacional de Cine como en las competencias de la Sociedad Municipal del Suelo y Vivienda. El documento jurídico echa por tierra la nueva estructura y el organigrama anunciado por el alcalde, Jesús Julio Carnero.

El informe jurídico del secretario general del Ayuntamiento de Valladolid solicitado por el Grupo Municipal Socialista es rotundo respecto a los cambios planteados por el nuevo equipo de gobierno: la SEMINCI (el principal evento de Castilla y León, según el Observatorio de la Cultura) seguirá dependiendo de la Concejalía de Cultura, en manos de Vox; y las competencias planteadas en la Sociedad Municipal del Suelo y Vivienda, VIVA, no son posibles.

El pasado 19 de junio el nuevo alcalde de Valladolid y actual candidato al Senado por el PP, Jesús Julio Carnero, firmó un decreto delegando competencias de Alcaldía en los diferentes concejales de su equipo de gobierno. Entre otras novedades, el regidor estableció la creación de una nueva concejalía de “Turismo, eventos y marca ciudad” cuya dirección asignó a su portavoz Blanca Jiménez. Entre las competencias de esta Área se incluyó SEMINCI, de tal forma que el Festival Internacional de Cine que dejaba de estar en el Área de Cultura, cuya titular es Irene Carvajal, primera teniente de alcalde y presidenta del Grupo municipal Vox.

Esta maniobra fue interpretada como una respuesta a la advertencia que el líder de la oposición, el ex alcalde Óscar Puente, realizó al nuevo regidor durante su discurso en la toma de posesión de la corporación, respecto al riesgo de injerencia por parte de la formación de ultraderecha sobre la programación del cine. Esta preocupación de la bancada socialista se desprendía, a su vez, de unas declaraciones del vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Juan García Gallardo (Vox), en las que cargaba contra el festival por sus “desviaciones ideológicas”, señalándolo por haberse “desviado de su esencia”. De esta forma, Carnero dio por arrebatada la SEMINCI a su socio de gobierno, aunque resultaba incomprensible que esta  seña de identidad de la cultura de Valladolid y Castilla y León quedara desgajada de la Concejalía que lleva el mismo nombre.  

El Grupo Socialista solicitó a la Secretaría General un informe de legalidad al respecto, considerando que la SEMINCI está adscrita a la Fundación Municipal de Cultura y que esta, al permanecer en la concejalía de Cultura, en manos de Vox, no podría ser gestionada por Blanca Jiménez. La respuesta de la Secretaría General ha confirmado las tesis del PSOE: SEMINCI depende financiera, orgánica y funcionalmente de la Fundación, “tiene que encajarse orgánicamente en sus órganos de gobierno”. Es decir, la concejala del área de Turismo, eventos y marca ciudad no puede llevar a cabo su “dirección política y administrativa”. Para cambiar esta situación se tendrían que modificar los estatutos de la Fundación, advierte el Secretario General, , en su informe:

De lo dicho se puede concluir, con meridiana claridad, que la SEMINCI, atendiendo a su contenido, es una actividad cultural de competencia municipal que se gestiona a través de la llamada Fundación Municipal de Cultura-Ayuntamiento.

El documento es concluyente en tres apartados:

1º Respecto a la dependencia financiera, orgánica y funcional de la SEMINCI hay que señalar que la misma, por su contenido cultural, lo es del organismo autónomo Fundación-Municipal de Cultura-Ayuntamiento de Valladolid.

2º Que la dependencia dicha hace que, tanto desde el punto de vista administrativo como presupuestario, las decisiones que se adopten sobre la SEMINCI tienen que encajarse orgánicamente en los órganos de gobierno de la Fundación dicha.

3º Que la dirección política y administrativa de la SEMINCI atribuida al Área de Turismo, Eventos y Marca Ciudad no la puede llevar a cabo directamente la concejala delegada general de ese Área en cuanto que, como se dice en el Decreto de delegación, ha de hacerse en coordinación con el Área de Cultura atendiendo al contenido de los Estatutos del Organismo Autónomo. Será la aplicación de esos estatutos lo que pueda determinar la posibilidad de que una concejala diferente de la delegada de cultura realice actuaciones, de dirección política y administrativa, en relación con la SEMINCI.

Los cambios en VIVA, hoy por hoy no son posibles.

De igual modo, el PSOE también solicitó informe de legalidad sobre las atribuciones que el alcalde realizó a través del mencionado decreto a la Sociedad de Municipal de Suelo y Vivienda (VIVA), relativas, entre otras a la gestión del patrimonio municipal de suelo, gestión del patrimonio histórico, proyecto de soterramiento o ciudad de la justicia. La respuesta del Secretario General va en una línea similar, si bien no tiene trasfondo político por cuanto no afecta más que a un área, la nueva de Urbanismo y vivienda, cuyo titular es José Ignacio Zarandona (PP). Para que la Sociedad asuma esas competencias son necesarios dos pasos: la modificación de los estatutos de VIVA y la posterior encomienda de gestión de la concejalía en la Sociedad para esas funciones.

El decreto del alcalde, expone el secretario general del Ayuntamiento de Valladolid, no permite entender que VIVA, SL pueda llevar a cabo, en estos momentos, las actuaciones que se dicen en el mismo respecto a las materias referidas en cuanto que ha de cumplirse, previamente lo ya indicado (modificación de los estatutos, en lo que sea necesario, y decisión administrativa sobre encomienda de una actuación para actuar como “medio propio”).