Los vecinos de Huerta del Rey, Girón, Villa de Prado y La Victoria serían los primeros beneficiarios de esta dotación al aire libre, pero el equipo de gobierno PP-Vox no compromete el presupuesto necesario para completar la obra

 

“Estamos hasta las narices, es muy desesperante”. Con esta expresión Fernando Polanco, presidente de la Asociación de Vecinos de Girón, describe el estado de ánimo de miles de vallisoletanos que siguen esperando la apertura de una dotación básica para la zona. Porque el viernes el Ayuntamiento abrirá las piscinas municipales al aire libre con una ausencia clamorosa: Riosol. Los concejales del Grupo Municipal Socialista se han trasladado al barrio para denunciar la demora de una obra iniciada durante la etapa de Óscar Puente en la Alcaldía; aseguran que este es un ejemplo de la mala gestión y la falta de voluntad política del equipo de gobierno PP-Vox para resolver los problemas reales de los ciudadanos. La promoción del deporte, la salud y el ocio saludable deben formar parte de las prioridades del Ayuntamiento de Valladolid como la administración más próxima a los ciudadanos.

Las obras para el reacondicionamiento y reapertura de la piscina de Riosol se adjudicaron a finales de 2022 por un importe de 822.528 € (IVA incluido).

Iniciadas las obras y aunque se ha ejecutado aproximadamente el 60% del proyecto, según la concejala de Participación Ciudadana y Deportes, Mayte Martínez, la empresa adjudicataria incurrió en incumplimientos, a lo que se sumó la aparición de amianto que hizo necesario contratar otra empresa para su retirada.

La concejala anunció el 24 de agosto del 2023 que se iba a rescindir el contrato con la empresa adjudicataria y que la intención era que la piscina abriera en 2024. La realidad es que, transcurrido un año, la única certeza es que esta piscina no se abrirá este año y, lamentablemente, no hay voluntad del equipo de gobierno PP-Vox para que se retome la

obra, con el consiguiente perjuicio para la ciudad y especialmente para los vecinos de los barrios del entorno: Huerta del Rey, Girón, Villa de Prado y La Victoria.

Los hechos constatan la inacción del equipo de gobierno. En el Consejo Rector de la Fundación Municipal de Deportes del pasado 19 de enero se informó que se esperaba que en ese mismo mes pudiera estar resuelto el contrato con la empresa adjudicataria, pero no hubo ningún compromiso para licitar la obra de nuevo.

En la sesión del mes siguiente, el 27 de febrero, se informó que la empresa había prestado su conformidad a la rescisión del contrato. Los concejales socialistas preguntaron a la concejala si había compromiso para llevar a cabo la nueva licitación. Maite Martínez respondió que cuando se incorporaran los remanentes se estudiaría.

En la sesión del 26 de marzo se acordó incorporar más de un millón de euros para diversas actuaciones, que unido a otra partida anterior alcanzaba la cifra más de millón y medio. Sorprendentemente, la Concejalía de Participación Ciudadana y Deportes no destinó ni un euro para a reanudar la ejecución la piscina de Riosol. En dicho Consejo la Concejala tampoco se comprometió a retomar la licitación.

En el Consejo Rector de la FMD del mes de abril se indicó que aún no se había rescindido el contrato y la concejala vinculó la construcción de la piscina con el aplazamiento de la aportación municipal a la Sociedad Alta Velocidad. No se comprometió a incorporar remanentes para volver a licitar la obra.

En el expediente de modificación de créditos número 6 del Ayuntamiento de Valladolid se incluye una transferencia de 700.000 euros a la Fundación Municipal de Deportes, pero una vez más no va a destinar dicho el dinero a la licitación de las obras. A fecha de hoy se desconoce si se ha rescindido la anterior adjudicación.

Todo este proceso ha sido consecuencia de la falta de voluntad política pues perfectamente pudo rescindirse la adjudicación en el segundo semestre del pasado año 2023 y haber finalizado la obra durante este 2024. Esto hubiera permitido la apertura de la piscina este verano.

Pero es más, si todo continúa así está prácticamente asegurado que la piscina de Riosol tampoco se abrirá en el verano del próximo año 2025 pues el equipo de gobierno PP-Vox,  hasta la fecha ha decidido no destinar ni un euro para esta actuación. Esta situación es aún más grave  cuando resulta que dado el importe de la adjudicación y que se había ejecutado aproximadamente un 60% de la obra la aportación económica a consignar para la nueva licitación en los presupuestos del 2024 sería bastante escasa, ya  que se trataría en todo caso de una obra a ejecutar en dos años (2024 y 2025) con vistas a la reapertura la próxima temporada. Sin embargo, la fecha de reinicio de las obras es una incógnita y aún más la apertura de la nueva instalación deportiva.   

Las obras de remodelación del recinto incluyen las actuaciones en el vaso de la piscina, los vestuarios, la depuradora y todo el entorno.