El primer pleno telemático de la historia del Ayuntamiento de Valladolid, que se retransmitió en directo a través de Internet, duró dos horas y se desarrolló con normalidad y en un tono predominantemente constructivo. Tras la identificación personal por parte de cada uno de los 27 miembros de la Corporación Municipal y la validación legal del secretario general, la sesión comenzó con el recuerdo a los fallecidos por el coronavirus y un minuto de silencio seguido por todos los concejales.

El alcalde, Óscar Puente, expresó el agradecimiento a la ciudadanía «por el alto grado de civismo que están demostrando en estos tiempos convulsos al seguir las recomendaciones que desde las instituciones se están haciendo para poder frenar cuanto antes la pandemia» . En su intervención también extendió las gracias a los miembros de la Corporación; a los profesionales, como los sanitarios; a «tantas y tantas personas de muy diversos sectores, algunos de ellos hasta ahora de poco prestigio social, y que en este momento están poniendo de manifiesto su verdadero valor, dando lo mejor de sí mismas para que dentro de la excepcionalidad podamos seguir desarrollando nuestra vida en las mejores condiciones posibles», y especialmente a los trabajadores del Ayuntamiento de Valladolid «que están teniendo un comportamiento ejemplar en estos difíciles momentos. Supone un orgullo y una garantía contar con una plantilla tan profesional y comprometida».

En su alocución –el texto figura en los archivos adjuntos- Óscar Puente reconoció «la actitud responsable y constructiva que han mantenido los grupos municipales». Asimismo, reivindicó el papel de «la política con mayúsculas como herramienta esencial para dirigir la acción de las administraciones en beneficio del conjunto de la ciudadanía» y reclamó el papel de los ayuntamientos y la necesidad de una solución global desde Europa.

«Que nadie se quede atrás es para nosotros, más que un deseo, un compromiso». A partir estas palabras el alcalde enumeró las actuaciones municipales realizadas desde el decreto del estado de alarma para asegurar las necesidades más básicas –por ejemplo, con las becas a 1.300 escolares- ; la atención a las personas sin hogar; los servicios de ayuda a domicilio y la atención a los mayores.

Apuesta por los servicios públicos y unidad política

Y tras las referencias a otras actuaciones del Ayuntamiento de Valladolid que confirman la continuidad en la gestión, como el incremento de 150 a 500 en las licencias para teletrabajo; la actuación de los servicios de limpieza; las medidas en el transporte público,… el alcalde finalizó su intervención invocando los servicios públicos y la unidad política frente a la crisis de salud pública.

«Concluyo diciendo que a mi juicio de esta crisis hemos de salir de forma distinta a la de 2008. Las políticas de austeridad no se compadecen con sus causas y harían recaer sobre los más débiles sus consecuencias. Es el momento de sentar las bases de una economía más justa. Redefinir los sectores estratégicos que deben ser objeto de desarrollo en el futuro. Fortalecer los servicios públicos que han demostrado ser el auténtico sostén de nuestra sociedad.

Y sí, podemos salir de esta crisis desde la unidad política. Una unidad para la cual existe un clima propicio en esta institución. Pero también quiero ser claro al respecto. Si no es posible esa unidad en todo, consigámosla en aquellas cuestiones en las que estemos más cerca, dejando de lado las políticas estrictamente partidistas. Y si no somos capaces de alcanzarla mantengamos al menos el tono constructivo que ha presidido este mandato desde su comienzo. La ciudadanía sin duda nos lo agradecerá

La sesión continuó con las intervenciones de los portavoces de los cinco grupos políticos: Javier García (Vox), María Sánchez (Valladolid Toma La Palabra), Martín Fernández Antolín (Ciudadanos), Pilar del Olmo (PP), y Pedro Herrero (PSOE).

Un día antes del pleno, el alcalde remitió a los grupos de la oposición el informe detallado de la gestión realizada desde el 15 de marzo desde las distintas áreas municipales. El documento, de 120 páginas, también fue remitido a los medios de comunicación.